domingo, enero 24, 2016

Nido

Mi hamaca, tu pulmón;
mi ventana, tu mirada.

Convivimos sin más verbos
que los latidos del corazón.
Aquí, los subterfugios no entran.
Aquí, danzan las transparencias.

Deseo puro eres cuando me evocas,
antes, ayer, hoy, ahora.
Me enternezco al darme cuenta…
y te acaricio suave por dentro.
Tú… sujetas tu pecho. Sonríes con paz.
Respiras tan profundo que me revuelcas.

Y entonces soy…
la agitada sirena de tus suspiros
en los mares apasionados de tu sangre.
Soy feliz…

 A veces me duermo. Jamás parto.
Mi pretérita impotencia he roto.
Con ella…
hice un otoño.
Lo presientes, lo sientes.

Sin mí, el vacío sería hondo.
El silencio, negro y callado.
El desamor, un verdugo.
El amor, solo una palabra.

No quieres consciencia.
Eliges tu ruta y velocidad.
Trotar en el tiempo.
¿Hacia dónde vas tan rápido?
¿Quieres llegar antes a la muerte?

Hoy es tu mañana.
Mañana ya será hoy.
Hoy, pronto será nada.
El tiempo es eterno, el fin no se lo lleva.
A nosotros sí. Ningún ser lo vence.
Y nos vamos sin nada más
que los tesoros del alma.

Está bien, no sufras con mis palabras.
Basta uno, basto yo.
Yo… lo he comprendido.
Con lágrima, con ayuno, con filo.
Soy mujer, soy vigilia, soy poeta.

El milagro es este espacio secreto.
Tu pecho es mi hogar.
Mi conexión, la esperanza.
Mi paraíso, el infinito.
Mi ensueño, tu alma.

Aquí, cuido el nido y el sentido.
Aquí… tú no puedes entrar.
Aquí… te quiero y te amo.
Aquí vivo ¡mi libertad!



P-Car

viernes, enero 15, 2016

Sentido único

Mis pensamientos se obstinaban en suprimir…
lo que se ha anquilosado en mi corazón.

Es medianoche.
El viento, como queriendo decir algo,
suave y tibio sopla un vals.
Abraza mi cuerpo,
me acaricia el rostro.

Bajo la luna, mi soledad y yo.
El hemisferio duerme, indocto.

Mi mirada disociada busca
entre nubes, estrellas y lo negro,
la estela de lo eterno.
El inicio del infinito.

El vals continúa.
El tiempo no.
Mi piel abre lento sus pétalos…
mis sentimientos la siguen.

Momento mágico.
Sentido único, el alma.
Tesoro imperecedero, el amor.
Llave sin réplica, la verdad.

Noche de demanda espiritual.
Entender la razón.
Vislumbrar una señal.
Perpetuar la misión.
O, tal vez, al fin acariciar
la ensoñación del milagro.


 P-Car

sábado, enero 09, 2016

Cuando el ruiseñor canta

El olvido, sutil,
teje riendas en mis sentidos.
Sangre y huesos,
piel y pensamiento.

El, mi alma protege
con el abrazo múltiple y estrecho
de infinitas arañas invisibles
que habitan en el viento.

Camino, llana, humilde,
sin más tiempo
que el que marcan las olas.

Sin presagios.
Sin prejuicios.
Sin querellas.

Sin nada más que mostrar
que la desnudez de mi mirada triste
y las heridas de mi alma dañada.

Al viento le pido…
Al tiempo lo dejo…

Sé que los recuerdos he de enterrar
al olvidar completamente…

como el cielo, al trueno y la tormenta
cuando el ruiseñor canta
al llegar la primavera.



P-Car