Me he
desesperado
mirando
atenta tu hacienda
donde tus
pasos iracundos
marcan
huellas profundas
al arrastrar
mohosas cadenas.
En tu
jardín de cemento
solo pasa
el viento gris
tiñendo tus
pupilas lapidarias
colmadas de
injusticias
sobre tus
labios de lamento.
Veloz he
necesitado huir
como gacela
en invierno
desde el
desliz de un sueño
cuando hoy logré
escapar
luego de un
largo cautiverio.
P-Car
Mi primera
publicación y premio
en “Castillo
Mágico de Poetas”
Amiga, que poema! cuanto dices en èl, me pongo de pie y te aplaudo, porque te admiro y te quiero!
ResponderBorrar