viernes, enero 31, 2020

Tragedia


Nunca el invierno fue tan vasto
y el frío tan filudo.
Nunca el aguacero tan pesado
y la niebla tan obtusa.
Nunca la noche tan negra
y el alba tan abandonado.

¡Jamás el silencio fue tan insondable
y las mismas frases, tan sin sentido!

Inevitablemente… contigo y sin ti viví:
quiebres, destronadas, ensayos de olvido.
Relevos, reencuentros, escapadas al filo.
Pero confieso que jamás había transitado
una cabal extinción de la esperanza
en la ruta árida de lo imposible.

Con carácter de tragedia   
una parte de mí se apaga.
Lo perfecto de mi esencia oscurece
jactancia del vacío, infinitamente.
Es como una dosis de impotente muerte
augurio de la que me arrasará totalmente.

Ya no hay preces.
Ya no hay magia.
Sin esa luz amada en mi alma
¡insistente y dramáticamente!
en mí ya no hay nada…
(nada de nada…)

Y en este ingente erial
nadie ausculta mi dolor.
Aquí, sobre mis huesos,
ni siquiera el viento
dejará una mísera flor.

Soy ignición sin llama.
Soy pena sin llanto.
Soy grito sin eco.
Soy amor puro,
¡muriendo!
.
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P-Car








Paty Carvajal-Chile
Derechos Reservados
Propiedad Intelectual
Imagen: Adam Martinakis

viernes, enero 24, 2020

Mil por mil veces


Durante las excesivas evocaciones
del resto de un decolorado calendario
no me pienses en el terruño de mi origen 
ni bajo la llanura donde será mi descanso.

No me imagines solitaria
no me presumas apenada.
Piénsame soleada, sonriente,
genial, vital, llena de gracia:
¡recuérdame de ti enamorada!

Yo no he de imaginarte ausente, inmutable.
No te repasaré tosco, hiriente, frío y callado.

Bizarra, de naturaleza te supondré desnudo
y así… entonces… te recordaré mil veces
y otras mil… y mil por mil veces más
con tu esencia diciéndome ¡te amo!

Y es que ya nada más importa
que de espíritu, ánimo y garbo
sabernos níveos, divinos, llanos.

Más aún que ayer y hoy -no sé si mañana-
sonando cual seductora danza de retazos  
de la pertinente y encantadora muerte
ya escuchamos sus puntiagudos pasos.

Me iré en un beso, en mi cruz, en algún llanto.
Me iré en un verso, en mi luz, en algún canto.

Como sea que Dios decida
me iré sin escándalo, y tú
no tendrás que enterarte.
De otros será el privilegio
el primer dolor de mi viaje.

Solo debes incorporar que con énfasis
he de evocarte en mi ulterior instante.

Y es que a donde sea que vuele
firme ubicaré mi estandarte
y coherente con lo que fui
- predilecto en mi espíritu -
por intuición, recelo y deleite del alma
en lo único eterno de mí…
amor… he de cuidarte.
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P-Car





Paty Carvajal-Chile
Derechos Reservados
Propiedad Intelectual
Imagen: Adam Martinakis

viernes, enero 10, 2020

Vital muerte


No sé qué me da por imaginar tu existencia.
La rutina de tus horas…, sin mí rutinarias.

Imaginarte muy solo y solitarias todas tus cosas.
Fría tu cama, insípido tu alimento, gris tu ropa.

Es como un sutil pecado, o un dardo no letal
que añoro se clave en el centro de tu corazón.

A veces me culpo por pensar así y delirar lo peor.
Me contemplo al espejo y chillo ¡esto no es amor!

Debe ser mi dolor el que emana este veneno a mi mente.
Debe ser mi propia soledad y tristeza que estiro hasta ti.

O será el sueño muerto que nos ha de penar de por vida
cual espectro entre dos almas que debieran estar atadas?

Nos amamos como adolescentes descubriendo la pasión
nos abandonamos como adultos orgullosos e indolentes
nos intentamos olvidar como…
¡Cariño!… ¡ya no sé cómo!

Solo sé que si no estás conmigo
no quiero que estés con nadie.

Que si no eres feliz a mi lado
no lo seas en ningún lugar.

Que si no enclavas y gozas mi cuerpo
no halles igual piel, para igual desear.

Soy egoísta, lo sé. No lo niego.
Te amé y te amo así, sin fin y
no sé otra manera de hacerlo.

Perdóname aunque yo jamás lo haga.
Antes de ti nunca fui terca y nefasta.
Me perfeccionaste diva y ¡muy mala!

Destinada a quererte de esta manera quedé
ignorante de que en tu mirada moraba
-me aguardaba y hallaría inocente-
a la vez de mi felicidad y plenitud
…mi irreversible vital muerte.

Tú lo sabías, fui una nueva víctima.
Pero como nadie es tan invencible
lo que nunca siquiera sospechaste 
fue que me poseerías y adorarías
¡exactamente como me amaste!

Ahora tú dime, sin presunciones
¡cómo querrías fuesen mis días!
…¿Y mis inaccesibles noches?
.
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P-Car





Paty Carvajal-Chile
Derechos Reservados
Propiedad Intelectual
Imagen: de Internet


POESÍA PRESENTADA AL XIII CONCURSO LITERARIO INTERNACIONAL "ÁNGEL GANIVET" 2019 (FINLANDIA)


viernes, enero 03, 2020

Locura de amor


Cuando comencé a ser tuya
debí sentir brisa de tumbas.
¿Cómo fue… -pregunto al delirio-
que con cada unión de cuerpos
en mí se engendraba
una ciega agonía?

Si mi corazón gozaba de tanta alegría
que de radiante se hizo estrella
sin siquiera imaginar que sus puntas
una a una, desangrarían mi alma.

A veces me extravío en la inconsistencia:
sé que el adorarte ha suscrito mi muerte
pero el no quererte ¡tampoco era la vida!
Y trato de olvidar para de amor no morir
pero agonizo, al olvidarme un poco de ti.

Al ignorar cómo de este fatigado caer salir
creo que solo tú puedes en mi auxilio venir.
Porque como si todo esto fuese insuficiente,
¡tú también me amaste! - Lo sabes. Lo sé -

Callo. Mejor a mí ven…
y regálame un último beso
el más dulce y mortífero a la vez.
Ese que me lleve a un contiguo infierno
donde se quite con horror mi entelequia
hasta llegar a merecer un rincón de cielo.

Seré perdonada, confío en aquello
solo es una cuestión de tiempo
y de volcarme a la impavidez
con que nací y fui revestida.

La inmensidad bien sabe que
nadie al iniciar un bello fuego
piensa en póstumas cenizas.
O que quien reviva en tus ojos
vislumbre un extraño suicidio.
O que al estar bajo tus caderas,
ningún ser con corazón y venas
piensa en lesiones sangrientas.
Y mi autenticidad, Dios la conoce.

Ya cédeme todas tus pócimas
que si lo haces de inmediato
a desaparecer estoy dispuesta
y así aceleres el siniestro viaje.

O tal vez ¡oh, tal vez! tal vez…
amándome como nos amábamos
el brío de tu cuerpo me desconcierte
y mi agua sexual, cristalina te sacie
y luego nos quedemos mirándonos:
puros, rústicos, amnésicos, perplejos.

Entonces allí, nada más expire y vuele
el sufrimiento, el silencio y el tiempo
al modularme tú, un creíble “te amo”
y yo, aún más que en ningún ayer
forajida, enamorada e inconsciente
abrazada por tu amor de cuentos
¡enloquezca de amor con creces!
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P-Car






Paty Carvajal-Chile
Derechos Reservados
Propiedad Intelectual
Imagen: Adam Martinakis