El terroso amor, Señor

 

Oh mi Dios:

 

Fue una larga vida, gracias Señor:

Extensa, ardua y desolada estadía.

Tú lo sabes Señor, todo lo sabes:

su causa, su sentido, su misión.

 

Por toda falta, por mi ansia,

por cualquier incoherencia

mi palabra amarga suplica

tu dulce e infinito perdón.

 

Más, humildemente te pido

devuélveme así, intacta…

con el mismo cuerpo y corazón

a donde el agua se deslía con el sol.

Así sea una breve permanencia,

eso no importa, mi Señor.

 

Quiero retornar aquí

a este índigo divino abrazo

habiendo sido amada mi sombra

habiéndola bendecido el alba.

 

Habiéndose el amor

sanado en amor:

el terroso amor, Señor.

 

Sin aquel paladar

sin aquel incienso;

sin esa felicidad

sin esa sapiencia

siento que en mi alma

algo oscurece, algo gime,

un hueco crece, algo falta.

 

Mi descorazonado pecho te pide,

con tu anuencia, regrésame por favor

al tiempo del tiempo, Señor.

 

Tu respuesta es mía

mi memoria es tuya.

 

Oh Señor…

En lento y delicado descenso

cantando ángeles y cruzando luceros

voy olvidando este encuentro.

 

Ya todo es silencio

¡Gracias mi Dios!

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P-Car

 

Paty Carvajal-Chile

N°1285 - 13.08.2021

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Mis deseos para ti

 

Que las horas te sonrían del alba al ocaso

y la magna luna, vele tu sueño y descanso.

Que la vida florezca y el aroma te envuelva

y jamás pierdas el sentido ni la esperanza.

 

Que nada te falte, para cada día levantarte

saludable y feliz, y así, esmerarte, luchar,

trabajar, crear, creer, crecer y cultivarte.

 

Que cada palabra y acción que te germine

contenga y conceda, tu infinita grandeza,

a ti, a tus afectos y a quien por ahí halles,

especialmente al más desatendido y triste.

 

Que toda decisión sea el reflejo de esa luz

que Jesús te regaló al venir a este mundo.

Que cada Navidad te recuerde ese milagro

para honrarlo, festejar y todos abrazarnos.

 

Que mi canto toque tu mirada y llegue a tu corazón.

Que, en mi voz, sientas que te estimo, que te valoro

y que, en esta próxima Navidad, te deseo lo mejor.

 

Que siempre halles un instante para mirar el cielo

y además de maravillarte con el sagrado universo

des las gracias por la existencia, por lo aprendido

y por ser lo que en realidad eres: un alma eterna

que ha de trascender la materialidad del planeta.

 

Y que nunca dudes que el amor es el eje,

el motivo, la gran respuesta, la verdad,  

el fin y el final de todo nacer y morir

y de que hoy, tú y yo, estemos aquí.

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P-Car

Paty Carvajal-Chile

N°1607 – 21.12.2023

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El resto de mi vida

 

No sé bien cuándo llegarás...

pero mi naturaleza lírica

y el más grande amor

se preparan cada día.

 

Mi pecho es un océano abierto

que conmovido de soles y lunas

lo habita la sinopsis de tu balsa

con toda su agitación y

toda su calma.

 

De contorno a huesos

mi organismo es un templo

atiborrado de flores y velas encendidas

en la expectación de la oración

-y la dulce adoración-

de tu cuerpo.

 

Mi reloj es una péndola loca

que, alborotada, solo danza

olvidando marcar las horas

porque da igual la fecha

y la estación designada...

 

bien sabe que llegarás

y en aquel momento

-no antes, no después-

yo entenderé que ese

era el instante justo

celosamente reservado

por el devenir del universo.

 

Los textos, sudarán su miedo y razón

y mirándonos, todo nos diremos,

lo que tuvo y no tuvo que morir

con amplia paz en el corazón.

 

Luego, tú y yo, siendo uno

gestaremos corolas albinas

en armonía con el más hondo

-sustancioso y hermoso-

de los silencios.

 

De nuestra unión...

de aquella bendición

del milagro del destino

solamente necesitaremos

la poesía como testigo.

 

En esta explosión de letras

-del alma, exacta, divina-

estés donde estés, a ti, solo a ti,

con fe, confío estas líneas

¡y el resto de mi vida!

 

Limpia de pasado, llana de futuro

con un manojo de pétalos infinitos

en el altar de los sueños cumplidos,

sin esperarte, te espero,

¡amor mío!

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P-Car

 

 Paty Carvajal-Chile

N°1574 – 30.10.2023

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Alguien me dijo

 

Alguien me dijo

que te vio por ahí

solitario, abatido, distante

en el barrio de ningún alma

bajo el árbol de ningún ave.

 

Que lucías muy cansado

con tus dedos trémulos

la vista obediente a los pasos

y los pasos serviles al tiempo.

 

Que parecías algo así como

la víctima y el verdugo

de ti mismo,

desnudándole el cuello

a un magro futuro.

 

Entonces pensé que tal vez,

todo eso sería distinto

si en lo real de tu vida

alguien que amaras y te amase

estuviese contigo.

 

Y juntos, fuesen a la plaza, sonrientes.

Y juntos, vislumbrar los niños jugando.

Y juntos, dar migas de pan a las palomas.

Y juntos, oír cómo cae, el agua de la fuente.

 

Y contentos... y agradecidos

existir -existir realmente-

hasta el abrazo de la muerte.

 

Alguien que no era alguien

me contó su historia y tu historia

-anhelos, ímpetus, lamentos-

y muchas otras cosas...

 

Alguien con mis ojos

con mi memoria

con mi razón

con mi amor

hoy te vio

y le nació

-tan solo quiso-

abrazarte.

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P-Car

Paty Carvajal-Chile

N°1569 – 28.10.2023

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Feroz pánico

No ceso de buscarte por cuevas y sendas

con un indócil pánico, ese del pavoroso

...¡encontrarte de veras!

 

Después de palmar tantas lunas

te preguntarás... ¿para qué?

Inquieta de amor -y dolor-

necesito me reveles lo tuyo

todo aquello que no verifico ni logro

sin el pestañeo de tus ojos.

 

Exactamente me señales,

de tu desvelo, la excitada hora

en que tu piel entera

aun me adora...

 

que yo, por ocultas ondas  

-las que el olvido no toca-

 balancearé tus caderas, seré tuya

y en el supremo instante 

del nevado gozo derramado

sentirás -y perpetuarás-

lo mucho que te amo.

 

Del futuro, quiero me confieses

si cavilas negociar tu vida.

Amalgamado a qué cuerpo y

enmarañado en qué cabello

-cuándo y dónde-

planeas tachar todo lo nuestro

incluido mi nombre.

 

Mi corazón, latidos detona.

El feroz pánico...

baboso abrió su boca,

jadeante y hambriento

uno a uno, mis nervios

extirpa... ¡y devora!

 

No, no, no, por tu bien

haz cuenta que no dije nada.

Amnésicas y licuadas derrama,

mis insensatas estrofas de agua.

 

De inmediato amor... ¡ahora!

que no vaya a ser cosa

que en precarios minutos

seas tú quien me encuentre

¡y me respondas!

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P-Car

 

 Paty Carvajal-Chile

N°1562 – 16.10.2023

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📷 Armand Tamboly

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No te atrevas

 

Calla, hay palabras muy bellas

pero oraciones que aniquilan.

Calla, que prefiero oír al viento

al mar, al invierno... ¡al futuro!

 

Calla, no vaya ser que expreses la verdad

oculta... en una infinitud taciturna...

y hoy sepamos que todo lo que sucedió

y lo que no sucedió en ese tiempo

fue abstracto, fue en vano, fue absurdo.

 

Déjame en ésta, mi diminuta balsa

que construí con mis propios recursos

ayudada por la fibra de mi esperanza

y la bruñida maestría de mi alma.

 

Déjame así, sobreviviente del océano,

rodeada de tiburones hambrientos

bajo negras tormentas que sobrecogen

y, a ratos, mecida por una garrafal calma 

que no siempre... da confianza.

 

Pero déjame en mi reducido mundo

en el que, hasta hoy, me salvé sola,

a tientas, a tropiezos, a pulso,

donde creció la mujer que soy

con lesiones, con hambre, con sudor.

 

Déjame aquí, donde el silencio

es la festividad de la aurora

si la poesía hace de remos.

Así, tal cual como me dejaste, sola

en este modesto espacio que de ti

no contiene una sola sombra.

 

Calla, no hables, no te atrevas...

que con una sola frase que enuncies

en un instante podría regresar

al instante del nunca más

y transformarlo en un...

¡contigo hasta la eternidad!

 

Calla, si de mi sueño irreal...

de tu vehemente proximidad,

de tus besos, de tu cuerpo, de tus yemas

de la total conmoción de mi realidad...

de mi imperiosa elevación...

de mi éxtasis por tu éxtasis,

otra vez, amor... ¡otra vez!

no me has de salvar.

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P-Car

 

 Paty Carvajal-Chile

N°1567 – 26.10.2023

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