lunes, enero 27, 2025

Suave y lento

 

Me gusta imaginarte como queriéndome

me gusta pensarte como extrañándome

me gusta hablarte suave y lento

como si mi voz fuese lo único

que quisieras oír.

 

Me gusta mirarte a los ojos

esos ojos que asoman en un cielo

meciendo un vals sobre mi techo.

 

Me gusta abrigarte en mi pecho

como a un recién nacido

que sufrió al salir de su nido

y susurrarte que todo estará bien

entre nosotros dos

y en el mundo entero.

 

Me gusta sentirte libre

me gusta sentirme libre:

de olvidarme, de amarte.

 

La vida a veces es tan extraña

y otras, totalmente al revés,

pero teniéndote conmigo

jamás ha de ser triste.

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P-Car



 

 Paty Carvajal-Chile

N°1680 – 19.10.2024

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lunes, enero 20, 2025

Dame un abrazo

 

Después del mundo ¿qué?

después del dolor ¿qué?

después de ti ¿qué?

 

Después de la ilusión de la luz

después del delirio de la llama,

luego de tantas y tantas palabras

¿qué? ¿qué? ¿qué?

 

Nada amor, tan solo envejecemos

recordando aquello que queremos

y luego, aquello que podemos.

 

Las cosas y las personas

retroceden o avanzan

pero ya no están muy cerca.

 

La soledad todo lo llena

la soledad todo lo vacía.

Entonces la embellecemos

con objetos, con colores,

con melodías, con poesía.

Más no deja de ser soledad:

soledad de inviernos,

soledad de lo incierto,

soledad del silencio,

soledad de lo yerto.

 

Ven Amor... dame un último abrazo,

uno que resuma toda nuestra historia,

uno que no conocerá la quijada del olvido,

uno que se agarre con brío a mi alma,

uno que muy lejos irá,

sin ti, pero conmigo.

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P-Car



 

 Paty Carvajal-Chile

N°1674 - 20.08.2024

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lunes, enero 13, 2025

Pájaros azules

 

Durante este soberbio tiempo

hemos hecho tantas cosas, cariño.

 

Hemos caminado descalzos

por los bordes más espumosos

de largas playas sin fondo.

 

Sin que ninguno logre un triunfo

hemos jugado a mirarnos fijo

sin sucumbir a una risa

o a un beso profundo.

 

Hemos contado estrellas

hasta quedarnos dormidos

y hemos dormido hasta que el sol

junto al lento sonido de las olas

poco a poco, nos han levantado.

 

Hemos visto hermosos pájaros azules

cruzando lustrosos cielos dorados

de norte a sur y de sur a norte.

 

Hemos hecho tantas cosas lindas

tantas otras más, muy locas,

para y por el amor que sentimos

juntos, hemos vivido infinitas horas.

 

Nunca pensé llegaría este regalo

de tenerte así de adherido

a mi casta, a mi alma.

 

Quién lo creería, amor,

tal vez solo el sol y la luna

si hace siglos que no te veo

si hace siglos que no me ves

pero estamos más juntos que nunca

y nos amamos mucho más que ayer.

 

Tengo tantas ganas de contártelo

pero temo a tus huidas sin sentido

y que me borres la magia única

de tenerte siempre así, conmigo.

 

Y tiemblo creyendo que en tu fuga

-hacia quizá cuando y donde-

nuestros bellos pájaros azules

copiando mi inocencia de ayer

todos ellos, te escolten.

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P-Car



 

 Paty Carvajal-Chile

N°1677 - 14.09.2024

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lunes, enero 06, 2025

Noche divina

 

Quise, pero no debía preguntar

si nuevamente pasaríamos

otra noche juntos.

 

Lo anhelaba de veras, en demasía,

pero que no es decoroso ni prudente

me lo había dejado bien claro la vida

junto a una montonera de amigas.

 

Pasamos una noche divina

unimos nuestros cuerpos

nuestros pensamientos

nuestras emociones

incluso reímos.

 

Para dormir lo poco que pudimos

te aferraste a mí, enroscado...

como un ser que crece pero que

no desea despegarse del nido.

 

Todo fluyó como si fuese nuestro

el utópico término: “perfecto”

 

Llegó la mañana, agitada...

el sol, el reloj, la ducha veloz

junto a un raro hedor en el aire

a rostros grises en cuerpos fríos,

a excesivos deberes sin alegrías.

 

Pero yo, aunque sé que no debía

quería expresarte lo lindo que fue

y preguntarte si, honestamente,

deseabas nos volviésemos a ver.

 

Estuve casi a punto de hacerlo

luego del último sorbo de café.

Más, no lo hice, fui moderna.

Hasta mi ego, siempre tenue,

de logro y orgullo se inflamó.

 

Eso sí, tuve que apretar mis labios

salvo para el dulce y ansioso beso del

“por favor, no te olvides de mí,

que ya te empiezo a querer”

 

Te fuiste y en un par de minutos

sentí un estruendo desde la calle.

Miré por el balcón y ahí estabas

tendido en un charco de sangre.

Un despistado envistió tu moto

no sabía si estabas muerto o no.

 

No sabes la pluralidad de pensamientos

que tuve mientras bajaba horrorizada.

El primordial, por qué no te dije

lo fascinante que fue conocer

el sereno de tu alma

en aquella velada.

 

Ni esa mañana ni nunca pudiste oírlo

y yo jamás, hasta hoy, hallé consuelo.

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P-Car



 

 Paty Carvajal-Chile

N°1527 – 23.07.2023

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