Cuando en tu
camino, vaciado de estrellas,
un ángel ilumine
la oscuridad perenne
sin que se pronuncie
una sola palabra
entenderás…
todas tus injusticias.
todas tus injusticias.
Intuirás la
lasitud de tu tiempo
al tragar el áspero
sinsabor
de tu llanto embrionario.
Lo sé: querrás volver
a mi alma.
Decirme aquello
que diste al silencio,
enmendar y escuchar
mil clemencias.
Imponente, necesitarás
amarme de nuevo
sentir la
ilusión que no todo está perdido.
La traba querido
es que, por el pasmo
y la emoción,
no habrás percibido
en su sacra mirada
que ese ser
sobrenatural…
seré yo.
P-Car
Que buen final! Me encantó.
ResponderBorrarSaludos
Gracias Guillermo por tu opinión, en realidad hasta a mí me pone nerviosa. Un abrazo.
BorrarHas bordado estos versos, felicidades.
ResponderBorrarUn abrazo.
Hola Rafael, gracias amigo por estar siempre cercano y dejarme tu parecer. Un abrazo grande.
BorrarQue bonito cuando dices que no todo está perdido que la ilusión y la esperanza uufff precioso magistrales versos amiguita un beso grande desde mi brillod el mar
ResponderBorrarHola Beatriz, qué lindas palabras me regalas, te mando un gracias con un abrazo!!! Te deseo una buena semana amiga.
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