Sensaciones
nuevas
recorren mis
venas rojas
y mis conexiones
cósmicas.
Me siento como
un ave, tal vez un ángel
como una nube o como
el mismísimo aire.
Me he liberado
de esposas y duras cadenas,
de mitos y excesivas
afirmaciones inútiles
de ansias, de
soledades que no eran tales
de agudos dolores
y mil enfermedades.
Me siento en una
renovada dimensión
donde es bello ser,
crear, reír y ser yo.
Entré en un
camino de apertura y comprensión
lo caminé paso a
paso y a medida que avanzaba
atrás, mágica y
milagrosamente quedaba
el desierto, el
sufrimiento, lo gris y la sed.
A la velocidad
de mi dulce entendimiento
fui viendo cielos
cada vez más celestes
campos cada vez más floridos
y verdes
y altas cascadas
transparentes.
Hoy, donde
quiera que esté
me siento tranquila
y completa.
Y es que atrás
quedó el fantasma del miedo:
desaparecieron
los juicios y resentimientos.
Vivo en el amor
a mí y al todo
conectada con el
aquí y el ahora
y con cada inhalación
consciente
soy una esencia plena
y agradecida
en constante unidad
con mi alma divina
cuidando la armonía
de su misión sagrada.
Y es que he
descubierto el secreto espiritual
la felicidad de
la paz y la paz de la felicidad
que después de tantos
milenios en tránsito
de un universo
infinito y de toda la eternidad
es lo único que nos
llevará a otro más allá.
Todo está en ti,
a tu alcance
busca la luz que
mora en tu ser
entra al sendero
del crecimiento
que quien con
honestidad busca
ha de encontrarse
para encontrar.
P-Car
Derechos
Reservados.
Propiedad
Intelectual.
Imagen: de
Internet.
Ser uno mismo y dejar atrás ese "fantasma del miedo" es algo importante en cada vida.
ResponderBorrarUn abrazo y felicidades por este trabajo.
Hola amigo, así es, y es importante nunca dejarse vencer.
BorrarUn gran abrazo espero que disfrutes mucho tu fin de semana.
Gracias por tu valiosa compañía.
Es tan reconfortante saberte ser, ser así, es como estar por encima de todo y mirar desde otra dimensión, lastima que yo, siga siendo esa "montaña rusa" que sube y baja constantemente.
ResponderBorrarUna joyita más la que nos dejas.
Abrazos y feliz domingo.
Hola querido amigo: Todos somos montañas rusas, porque todos somos humanos, yo también. Pero cuando uno escucha, aprende y se enfoca, las ondas de esa montaña son cada vez más suaves, y los vértigos cada vez menos en su cantidad e intensidad...
BorrarY nada es "una lástima", como tú mencionas, al contrario, para vivir los procesos se necesita sentir las dualidades: no podríamos reconocer la alegría si no conociésemos la tristeza. No podríamos ansiar la paz si no viviésemos la alteración.
Lo importante es no aferrarse a nada ni a nadie, entender que la vida es dinámica y que es una escuela del alma. La ley de ritmo es una ley universal, y es importante leer las siete y entenderlas todas, con una mirada amorosa, porque todo está concebido para nuestra iluminación.
Y con respecto al amor de pareja, mi aprendizaje es que si te enamoras de alguien y decides amarla, y deseas que esa persona sea tu compañera... bueno, está todo bien y hay que recibir ese amor en tu corazón como una bendición, porque amar es un regalo del cielo, y si además ella te corresponde, eso es espléndido, pero hay que entender que por distintos motivos, que pueden ser movimientos emocionales, movimientos vitales, etc eso puede que no dure hasta la muerte física, no obstante lo deseemos y lo pidamos día a día a la divinidad y al universo.
Saber que actuamos bien y fuimos bondadosos, es algo que nos da paz, y esa tranquilidad es lo más importante. Nada que no puedas darte a ti mismo, podrá salir de ti hacia otro ser u otros seres.
Bueno amigo, el tema me remueve mucho y cada día aprendo un poco más, me atrae, me nutre, me regala estados de plena consciencia, y a veces flaqueo pero soy compasiva conmigo misma, ya que soy humana y por ende soy nada más que una alumna que nunca ha de graduarse, al menos en esta dimensión, pero que su alma, espera graduarse alguna vez, en la eternidad.
Te deseo lo mejor de la vida, y que es sentir y cultivar lo que está en ti amigo, en tu corazón y en tu alma.
Un gran abrazo, buen domingo y buena semana para ti.
Gracias siempre por tu generosa compañía.
Hoy, donde quiera que esté
ResponderBorrarme siento tranquila y completa.
Y es que atrás quedó el fantasma del miedo:
desaparecieron los juicios y resentimientos.
Simplemente, me encantó!!!