No soy apoderada
del juicioso tiempo,
nadie, salvo quizás,
el tiempo.
De mi
pensamiento,
errores y
aciertos
apenas lo
soy.
No soy dueña
de tus ojos,
de tus temblores,
utopías, decretos
ni del pasado
que nos unió.
Sin embargo, luego
de bordar con oro
mis caderas, mis
labios, mis llagas;
de admirar el
ocaso más allá de las rosadas nubes
que pasan
como religiones en celo
anunciando la
fecundación
de un nuevo
infinito.
Después de
aquello
justo a la
hora, esa hora…
en que la
gente buena y los otros
caen agrestes,
iletrados, instintivos
a hacer cálculos,
conjeturas del día siguiente,
a dormir, a
soñar, a cumplir el amor…
mi corazón
-potro excitado-
late aventurado…
¡fuerte!
Y es que cuando
la inspiración me da a luz
sobre la extensa
sábana de la nada,
me concibo
inmaculada:
una recién
nacida.
Luna
amarilla, sol, un rayo caliente,
en la
cerrazón de la noche fría
que llora y grita:
¡estoy viva!
De tu nublada
existencia
a la plomiza melancolía
mía
soy la literata,
la maestra, la artífice,
la venosa mano
que guía.
Entonces sí -ay
mi Dios-
habito el mayúsculo
espacio y me hago
benefactora
del ayer, del presente
y del instante
siguiente.
Tuyo, mío, nuestro.
¡Escarlata del
mundo!
Del encanto,
del prodigio, de la línea,
del primer y último
respiro de vida.
Propietaria
de las estrellas todas,
vigía, en una
topografía sin fin.
Sabida, en la
sinfonía de las horas
desde la
medianoche de las adivinas
al amanecer
angelical de las alondras.
Barca con alta
bandera blanca
surfeando la espuma de las olas
sobre un índigo
que hidrata y tiñe
el sonámbulo
lapsus que no quiere sucumbir.
Sí amor, y mientras
conmuevo mis trazos
te recreo, te
levanto, te edifico, te sano.
Soy feliz y
como nunca así
¡te amo y me
amo!
Y es que cuando,
en ese ayuno del yugo,
hago sensible
presencia de tu perversa ausencia
me convierto en
tu sensual sirena,
libre,
acuática, perfecta…
¡ama de tu
alma!
Sí, amante ardiente
soy de mis letras
y de ti, amor
querido,
mi bien -mi tormento,
mi tormenta-
con una bestialidad
mansa.
Solamente, mi
cielo…
en esos
ansiados momentos que mi alma,
durante un
sol completo espera y añora
¡desde el
reposado crepúsculo
al majestuoso
gong del alba!
.
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.
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Un largo grito se escapa del alma de tu protagonista... Felicidades por tu escrito.
ResponderBorrarUn abrazo y feliz día, querida amiga.
Hola amigo, gracias de corazón, tus palabras me llenan de nuevo impulso.
BorrarUn fuerte abrazo.
Muito belo Paty, o teu poema!
ResponderBorrarA limpidez das palavras do poema revelam a tua alma sensível e conectada em todas as dimensões humanas e afectivas.
A Poesia, desnuda o nosso ser, sem complexos, com a verdade em que sempre se traduz a alma do poema!
Te dejo un abrazo!
Obrigado amigo, a vida está nos dando mensagens constantes, sinais. Toda sabedoria está em despertar os sentidos ao máximo, a fim de expandir nossa consciência ao máximo.
BorrarUm abraço poderoso.
¡Te amo y me amo!.. Hermosa frase.
ResponderBorrarHola, gracias por llegar hasta este rincón. Eres muy bienvenido(a)
BorrarUn abrazo. Vuelve cuando quieras.
Voluptuoso irrefrenable lirismo, Paty. "El majestuodo gong del alba..." Excelso como metàfora, envidiable como verso.
ResponderBorrarAbrazo sin sombrero.
Hola Carlos, muchas gracias por tu inspirador comentario, me haces sentir muy bien. Menciono bastante al alba en mis poesías, debe ser que soy madrugadora y siempre veo amanecer, me parece un evento precioso y lleno de nueva energía.
BorrarUn abrazo enorme.
Si, eres amante ardiente de tus letras Paty, que profundo y bello poema. Saludos amiga.
ResponderBorrarHola Sandra, buenos días. Gracias por tu pensamiento generoso. Es cierto, amo escribir con todo mi corazón.
BorrarUn beso y abrazo para ti, poeta!
Tus poemas no merecen un único comentario.
ResponderBorrarMerecen ser leídos y releídos, disfrutados y también agradecidos.
Es magnífico todo lo que escribes.
Te aplaudo.
Besos.
Hola Toro Salvaje, no salvaje, gracias con el corazón abierto. Me emociona leer lo que piensas de mis letras. A veces nos hacen mucha falta estos tragos luminosos, para emborracharnos de luz, y así continuar erguidos y no recogernos ante nada, salvo para dar las gracias nuevamente, como yo te las doy a ti, nuevamente.
BorrarUn abrazo de almas poetas!
Fijate para mi el poema pertenece a una era
ResponderBorrarno la que vivo
saludos preciosa
Hola Mucha, gracias por venir.
BorrarMuchos poetas viajamos en el tiempo de los eternos sentimientos, esos que, bien en el fondo, nunca van a cambiar. Lo que cambia es lo aparente, el tenor y el valor del show, lo que se muestra, más aún hoy en que vivimos entre pantallas y pantallazos.
Saludos para ti también. Gracias nuevamente.
Hola Paty!
ResponderBorrarVolto para te reler e desejar uma semana feliz!
Un abrazo!
Hola, un gusto saber tu preocupación por mi bienestar, feliz semana para vc también.
BorrarUn gran abrazo.