Cual aparición apareciste
tibio relámpago sin borrasca.
De galanes azules cubrías tu dermis
con entelequias y ardores, tu alma.
Orillaste en mí tu apacible mirada
en medio de la celeridad rutinaria.
Osadías de cuerpo y corazón que
solazaron mi ligereza y razón.
Ocurrió algo inusual
osé no pensar y
a ir más allá me atreví:
provoqué, nada más sentir.
Entonces allí
sin disimulo de ti…
me detuve solo a soñar y
de emoción ¡me estremecí!
Hoy, sin asta ni explicación
el gris abrió su gran garganta
y con esos bellos óleos azules
abarrotó sus vacíos y ansias.
Y yo… en esta incómoda inmovilidad
esperando me engulla a mí también
-el gris, el tiempo o la verdad-
al silencio sin eco le sonsaco:
¿estoy enloqueciendo o
…fuiste real?
.
.
.
P-Car
Paty Carvajal-Chile
Derechos
Reservados.
Propiedad
Intelectual.
Imagen: Dimitra
Milan.
A veces, esa división, entre los sueños y la realidad es algo muy débil en la poesía.
ResponderBorrarUn abrazo en la tarde.
Hola amigo, cuánta razón tienes!!! A veces quisiéramos que esos sueños fuesen la realidad.... O lo son???
BorrarBesos y buen día, aquí es feriado, mucho relajo.
Gracias por tu cálida compañía.
Y que más da si sueño o realidad, si lo que provoca nos toca de forma particular.
ResponderBorrarUn abrazo grande Paty.
Hola Agapxis... lo mismo pienso, al final todo en la vida es como lo vemos, como lo sentimos y como... luego, lo recordamos. Cada uno tiene su propio mundo interno, único, infinito, esplendoroso.
BorrarGracias amigo, me encanta como piensas.
Un abrazo.