martes, septiembre 14, 2021

Rosado instante

 

Y yo, que creí haber querido

¡haberlo adorado!

Oh, extinto pensamiento:

estéril vereda sin bruma,

sin espuma, sin cuna…

¡Sin inmensidad!

 

Yo, que anhelante sujeté su mano

sinopsis de un azuloso relámpago

que promovió mi sudor y mi canto.

 

Que le conduje a mis praderas

a sembrar sus guapas semillas

enervando las corolas de la tierra.

 

Yo, que sin escudriñar lo suyo

le sometí a mi prosa, a mi llanto,

a mi sordidez… ¡a mi espanto!

 

Yo, la despierta, la insomne, la hacedora,

obrera, en los valles y macizos del arrojo.

Estrella resbalada del cielo,

incendiada en sus ojos…

Flor de un retoño, sí, yo…

¡calcinada de pronto!  

por error y abandono.

 

En este, ajeno y propio

peliagudo bosque, llamado vida

ya sin astros, ya sin brisa,

ya sin agua, ya sin luna.

 

Sin sus cultos ojos

que todo lo vivifican

que todo lo enternecen

que todo lo iluminan

que todo lo fortalecen.

 

Yo… ¡yo no sabía nada!

ciertamente de él… ¡nada!

Ni de su tedio, ni de su pena,

ni de su empeño, ni de sus guerras.

Nada… ¡de las cruzadas

y conquistas de su alma!

 

Sin su vuelo de ilustrada águila

sobre marchitos de desmayados

incontables albas y ocasos,

todo lo que hoy sé,

todo lo que hoy soy,

lo he debido entender, incubar,

sin su vena, sin su venia,

sin su calor, sin su amor.

 

Presa, entre límpidos cristales

-barrotes de hielo y de fuego-

he frisado mis huesos, he estriado mi nicho,

he vaciado mi sangre, he olido mi desenlace.

¡He llorado!

¡He sufrido!

 

Oh, nubes corpulentas que chorrean  

lágrimas pardas, de arena, de tierra

sobre los capullos, sobre las piedras.

 

Oh, viento denso, rumor de llantos,

que arrastras por avenidas vacías

la congoja y el duelo de tantos.

 

Oh muerte, que me miras recto

atravesando mis pupilas

de espeluznante miedo.

 

Véanme aquí -adviérteme vida-

con mi novela, con mi perfidia,

respirando oculto, cada segundo

agradecida, sí, es verdad,

de aún estar. Más… así…

¡en la más pedante soledad!

 

Rosado instante, de mi ralo corazón,

así y aquí, literalmente partida en dos

por el agudo filo de la indignidad  

quiero aseverar, desplegar:

de su hidalguía que venero,

a sus cálidas yemas, tan mías…

 

Enterrados ya, el ego y orgullo,

ante mi Dios, mi tedio y el mundo,

en este anémico atardecer del sentenciado anuario

con tajante certeza, así duela, juro…  

-consciente y espiritual, cabal-

que, más que nunca, con mi alma,

así no me abrace nunca más

de verdad yo… le amo.

.

.

.

P-Car




 Paty Carvajal-Chile

Derechos Reservados

Propiedad Intelectual

Imagen: Adam Martinakis


16 comentarios:

  1. Versos para un relato de amor...
    Un abrazo.

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    1. Hola amigo, buen día, gracias por tu lectura. Hay relatos y relatos de amor.

      Un fuerte abrazo.

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  2. Un amor desesperado se vistió con el más hermoso poema que he leído en tiempo.
    Te felicito.

    Besos.

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    1. Hola Toro, gracias amigo, me encanta saber que ha sido de tu agrado a ese punto.

      Gracias por tu compañía y el enorme incentivo, lo atesoro. Un abrazo.

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  3. Brutal Paty! Que dominio del lenguaje, del ritmo, de los sentimientos...Un poema increíble. Enhorabuena!!!!! Besos.

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    1. Hola Republicano, mil gracias amigo, celebro que lo leas y que te agrade así.

      Un abrazo.

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  4. Un canto en desesperados versos de amor. Saludos amiga.

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    1. Hola Sandra, buenos días. Hay desesperaciones que se manifiestan con calma, en reflexión, en encierro... y finalmente se transforman y te transforman.

      Gracias por venir. Un beso.

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  5. Lo cruento del amor pero también lo gozoso e inolvidable... Es como una oda de nostalgias en soledad declamadas con depurado poético lenguaje.

    Abrazo sin sombrero, amiga.

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    1. Hola Carlos. Gracias por venir.

      Es interesante recibir distintas miradas sobre una misma poesía. Me gusta que la poesía sea así, multidireccional, multifacética, expansiva, refractaria... y de todos!

      Un abrazo amigo.

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  6. Paty! O meu aplauso.
    Acabo de ler um texto poético delicioso,
    talhado com o fogo
    tal como as plantas que florescem
    com o calor do sol.
    Mas há palavras como rios
    que desaguam na nascente!
    Pássaros que voam docilmente
    sob o perfil das silabas!
    Eu, limito-me a guardar um suspiro
    do escultor de tão deliciosas palavras...

    Te dejo mi cariño y mi abrazo!

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    1. Hola Albino, gracias infinitas amigo. Tu comentario es un regalo, para mi camino, para mi corazón. Es tan bello escribir y sentir que uno, humildemente, puede afectar, conmover, hacer reflexionar. Todo cobra mayor sentido si es así.

      Un tremendo abrazo. Que pases lindos momentos.

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  7. Hay que sentir de una forma inmensa el amor, tenerlo tan macerado en el alma y dejar que el sentimiento estalle de belleza y creatividad, para poder escribir unos versos así.

    Siempre lo digo la poesía aquí es muy elevada y por eso llevo tanto tiempo leyendo tu poesía y quizás el olvido me abrace en este momento y no recuerde todo, pero hoy te he leído creo que los mejores versos que has escrito.

    Ya sé que los poetas los queremos a, todos por igual, pero permite me como lector que yo hasta nueva sorpresa me quede con estos enormes_bellos versos.

    Un abrazo.

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    1. Hola Agapxis, realmente es maravilloso despertar, sentarme a tomar mi café, abrir el computador y encontrar tu precioso mensaje. Gracias por este desayuno tan nutritivo para el alma. Me emociona leer cada línea de tu comentario.

      Gracias, gracias, gracias... amigo!!!! Un largo abrazo.

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