Dime luna

Si en las noches mis pensamientos durmieran, cuan distintas serían mis mañanas, porque si duermo, contigo sueño, pero en desvelo, sé que no estás conmigo y te extraño, como extrañaría el mar a las olas...

Luna blanca que me miras

entre tantas lunas de colores,

baja… consuélame, arrúllame

cuéntame un cuento de estrellas

deja que descanse en tus sedas.

Mi mente está agotada, mis ojos, hundidos, mis versos enviciados de tu fruto. Mi piel… ay mi piel… mi piel está quieta, tranquila, rutinaria. La forcé a olvidar lo que es estar en tus brazos.

Dime luna

cómo se vive feliz

sin el azul cielo de sus ojos

sin su aroma a montaña de cedros

sin su voz, diciéndome te amo

sin sus rayos de sol al alba

iluminando mi alma.

Pasan las jornadas, los otoños… ¡si hasta la pena pasa! Sucede el tiempo, la vida… y tú… amor mío, no estás… ¡no vuelves! Si pareciese que nuestro anhelo nunca será verdad y al final, lo único infinito será el silencio y lo único eterno, esta soledad.

P-Car