Esta es una
historia extraña pero créanme… cierta.
Una vez dejé
mi puerta sin candado y cuando hasta la luna dormía, el llegó y yo, creyendo
que soñaba, no hice nada más que acomodarme. De ahí en más, cada noche él se
infiltraba en mis sábanas y claro está, yo lo dejaba.
Nunca supe su
nombre y es que en realidad no necesitaba saberlo, ni me importaba, tampoco su pasado
o si tenía rango. Yo solamente me dejaba embaucar por su aroma a hiedra de
campo y, a medida que se acercaba, por el calor de la sangre laboriosa, hasta
que finalmente me abrazaba, con lo cual, yo me sentía tibia, protegida, necesitada
y por sobre todo… querida.
Así descansábamos
hasta justo antes de despuntar el alba. Luego el me daba un beso en mi espalda
y silbando, se iba rumbo al río, cerca del bosque. Todo aquello me relajaba, yo
era muy feliz -sí que lo era-. Cuánto me gustaba lo que tenía con este hombre,
a quien, le hubiese confiado ¡todo!
Después de
cuatro estaciones, una noche no regresó;.. nunca entendí qué le sucedió y lo
peor es que a nadie podía preguntar por alguien que no conocía, más que mal, poco
sabía o más bien dicho… nada.
Teníamos lo
que queríamos tener, sabíamos lo que necesitábamos saber, lo demás sobraba. En
fin, lloré lluvias de pena y sin otra salida durante un largo tiempo, observé
con mayor atención los lugares, la gente, los paisajes y por supuesto, el río.
Tengo el íntimo
anhelo que desde cualquier lugar del planeta -o del cielo- el lea mis versos y se
entere que aunque han pasado muchos años, cada noche creo llegará de nuevo,
porque… aún lo extraño.
Hasta hoy, el
fue el único hombre que con religiosidad, cuidó así de mi cuerpo y como nadie
más… amó mi alma.
P-Car
Pues sea cierta o no, es una historia curiosa y en la que parece que nació en el corazón de tu protagonista un sentimiento y un recuerdo que nunca se olvidará-
ResponderBorrarUn abrazo en la noche querida amiga.
Así es Rafael, quizás sea porque ellos no permitieron que nada perturbara el sueño durante su sueño!!!
BorrarBesos amigo y gracias!!!
Puede ser que encuentre el rastro de tus versos y vuelva a los brazos que le esperan.
ResponderBorrarQuizás esta noche de verano.
Dulces besos y lindo fin de semana.
Ay, qué lindo, qué romántico Dulce.
BorrarSi que eres muy dulce amigo.
Besos.
Como olvidar una historia tan bella y extraña, casi irreal. Pero la vida tiene esos “milagros” que solo le suceden a personas elegidas. Siéntete dichosa de haber vivido algo así, hay personas que nunca lo logran.
ResponderBorrarCariños….
¿La vida tiene milagros?... si amiga, desde el comienzo, ya que la vida misma es un milagro, pero si es que de historias inusuales hablamos, estoy de acuerdo, la vida te puede sorprender con un milagro tan lindo como el que te ame quien amas...
BorrarBesos poeta!!!!
El único hombre que con religiosidad cuidó así de mi cuerpo... Qué bonito, Paty. Ojalá que te vuelva a amar el alma. Un abrazo.
ResponderBorrarSi Alfredo, creo que cuando dices amar, muchas veces no lo piensas mucho, pero el amor que dura es el amor al alma... Si no, qué nos quedaría cuando estemos viejitos y arrugados... jajaja.......
BorrarBesos amigo, que tengas un lindo sábado.
Qué bonita historia, Paty, hay sentimientos que nunca pueden olvidarse.
ResponderBorrarUn beso.
El recuerdo debe permanecer, no el dolor ni los traumas, pero cuando el recuerdo es de algo hermoso, permanece como una vitamina que nos energiza...
BorrarGracias amiga, besos para ti.